Competencia

La rivalidad por ser el mejor es algo prácticamente innato y en el mundo empresarial es una de las razones de existencia de la mercadotecnia. Generar nuevos productos, diferencia en precio, aumento en ventas, generar más compradores, y regulación en el mercado. Así ha nacido y evolucionado la competencia.

Hablaremos sobre:

• La definición de competencia.
• Su importancia.
• Tipos de competencia.
• Estrategias y costos.
• Ejemplos y cómo implementar la competencia.

Prepárate, porque este tema es muy apasionante, pues es la competencia la que pone a prueba nuestra creatividad y madera de empresarios  y nos reta a generar estrategias, después de todo, sin competencia, tener una empresa no sería tan divertido, ¿No crees?

¿Qué la competencia?

Dentro del mundo de la economía, la competencia es definida como “la capacidad para responder a las exigencias individuales o sociales que permiten realizar una actividad o una tarea, con base en habilidades prácticas, conocimientos actitudes, y otros elementos sociales, utilizados para actuar de manera eficaz” (OCDE citado por López, 2016: 314). Tal concepto, trasladado al mundo empresarial, indica que la competencia está siempre en el mercado, convirtiéndose en una especie de lucha entre las empresas, donde cada una busca obtener un beneficio derivado de la oferta y la demanda.

Importancia de la competencia

Para cualquier ámbito la competencia es incluso necesaria, pues a través de ella se establece una especie de regulación en el mercado, ya que los precios de productos y servicios ofertados se van ajustando, acorde a lo ofrecido por los mismos vendedores; generando así muchas opciones para los clientes.

Estas alternativas radican en mejora de precios o calidad en los productos, principalmente.

Otro aspecto importante es que la competencia permite alcanzar la eficiencia productiva; pues si una industria resulta atractiva por generar beneficios superiores a los normales, llamará la atención para que otras empresas levanten la mano y quieran crear la suya (para hacer frente a ese negocio que le está yendo tan bien), hecho que provocará mayor demanda de insumos, aumento de precio en estos y costos elevados, lo cual desembocará en la salida de algunas empresas, dando permanencia solamente a un número socialmente óptimo.

En resumen, es una especie de regulador para las industrias, para la oferta y la demanda.

Tipos de competencia

En el mercado hay cuatro principales tipos de competencia, Paul G. Keat y Philip K. Y. Young (2004: 398) las definen como:

1. Competencia perfecta. Existe gran número de compradores y vendedores, queriendo adquirir productos estandarizados, es decir, casi similares; la entrada y salida del mercado es sencilla y la competencia no se basa en el precio imposible.
2. Competencia monopolística. Es el poder de mercado con base en la diferenciación de producto; existe un gran número de empresas de tamaño relativamente pequeño, que actúan de manera independiente. Las empresas tienen libertad de entrada y salida en el mercado.
3. Oligopolio. Consiste en un pequeño número de empresas mutuamente independientes, hay más de un par pero no llegan a ser demasiadas; el producto es diferente para cada negocio, la entrada y salida del mercado es difícil; y, es muy importante para las empresas no basar la competencia en el precio, para no generar ventaja desleal.
4. Monopolio. Es el poder de mercado absoluto, sujeto a regulación gubernamental, la empresa es la industria, el producto es único o sin sustitutos cercanos; entrar o salir del mercado es casi imposible por las barreras existentes. Y es innecesaria la competencia no basada en el precio.

Estrategias que podemos implementar para competir

Independientemente del giro que tenga tu empresa, es evidente que en uno o varios departamentos de la misma existe un espacio para aplicar y medir la competencia; pues bien, nosotros entendemos que como empresario (a) inteligente estás en constante búsqueda de estrategias para mejorar y alcanzar el éxito.

Por ello, compartimos contigo algunas estrategias que puedes considerar para ser un negocio más competitivo, dentro de los valores exigidos por los clientes, incluso, por los mismos empresarios que compiten directamente contigo.

Al parecer, el reto diario es una respuesta rápida en el mercado; para ello, las empresas deben contar con habilidades aptas para cada cambio, en el menor tiempo posible y con mayor eficacia. En este sentido, algunas propuestas son las siguientes:

Utilizar el modelo de las 5 fuerzas de Porter

Para identificar quiénes son los competidores, quiénes no lo son y cuáles podrían llegar a serlo. Así como aspectos específicos de cada competidor y qué productos o servicios pudieran ser más atractivos para los actuales clientes. Para profundizar en el tema, te sugerimos leer nuestro articulo sobre las 5 fuerzas de Porter.

Construir una competencia basada en habilidades

Es una estrategia que muchas compañías están optando por probar, al notar que permite a las empresas ser más proactivas que reactivas. Por otra parte, las habilidades estratégicas parten de inversiones estratégicas en infraestructuras de apoyo, que serán el vínculo con las demás unidades de negocio y con las funciones tradicionales de la Compañía.

Emplear procesos tecnológicos, como la Inteligencia Competitiva,

Tiene su soporte en herramientas específicas de obtención, análisis, difusión e interpretación de información relevante sobre el entorno competitivo, la cual se transmite a los responsables de una organización, con objeto de generar un contexto idóneo para la toma de decisiones.

Desarrollar una estructura y cultura organizacional

¿Para qué? Para ser capaz de responder a los cambios y tendencias identificadas en los mercados, en el menor tiempo posible, y con comprensión sumamente adecuada. De igual forma, este desarrollo permitirá lograr alianzas estratégicas, que pueden resultar en una gran ventaja competitiva.

Cuando existe una estructura organizacional, la empresa estará mejor preparada para:

1. Crear un marketing bien enfocado a lo que desea lograrse, valiéndose de nuevas herramientas que llevarán tu mensaje a otros niveles.
2. Ofrecer al cliente productos o servicios que cubran sus necesidades, pero también algunos que se anticipen a ellas, y con anterioridad muestren que pueden ser utilizados antes de ser solicitados por el consumidor.
3. Optimizar los recursos materiales, humanos y técnicos de la empresa, para que los resultados se cumplan en tiempo, forma y eficientemente

Ejemplos

Ha sido notable tanto para consumidores como dueños de empresas, la competencia tan fuerte que existe entre distintos negocios, de todo tipo, y las grandes compañías no son la excepción, aquí unos ejemplos:

Competencia entre Apple y Samsung.

Ambas marcas han peleado comercialmente con sus dispositivos móviles, en características como diseño, pantalla y tecnología. El gigante estadounidense Apple básicamente compite con su marca iPhone, mientras que su rival surcoreano Samsung hace lo propio con su gama de smartphones.

Sin embargo, Apple tiene varias ventajas competitivas; entre ellas, que compite en el sector tecnológico, tanto en la producción y diseño de software como de hardware (ordenadores, reproductores de música, teléfonos móviles, tabletas) básicamente desde la diferenciación.

La empresa ha sido muy hábil para identificar las necesidades y oportunidades del entorno, ofreciendo rápidamente productos para ello. Realiza un detallado análisis y vigilancia de las tendencias del mercado, buscando nuevas oportunidades.

De igual forma, apuesta por la capacidad de innovación, creatividad y originalidad, para lo que lleva a cabo grandes inversiones; hecho que le permite ser el primero en lanzar y renovar productos. Aunado al control exhaustivo de cada aspecto de sus productos, desde que se conciben hasta después de ser adquiridos por el usuario (postventa).

Ante ello, parece que Samsung, aunque ha incrementado sus ventas sigue lejos de ser el número uno en este sector, al menos hasta el momento.

Competencia entre Google y Amazon.

Según los datos en 2015, alrededor del 54% de las búsquedas de productos comenzaron en Google, y 46% en Amazon; como todos sabemos, en Google podemos buscar, crear anuncios, usar correo electrónico, etc, pero las compras en línea no son su fuerte.

Aún así, la empresa estadounidense, Google, buscó adentrarse en este ámbito, mediante el sitio de compras de la compañía, denominado Google Express.

Por otra parte Google Cloud está compitiendo con Amazon Web Services en cuanto a servicios de computación en la nube. Twitch de Amazon se está convirtiendo en una alternativa popular a YouTube de Google para el contenido de videos en línea, y Google Home y Amazon Echo, compitiendo en el ámbito de altavoces inteligentes que funcionan con los asistentes inteligentes de cada una.

Ante ello, Amazon ha estado creando herramientas para ayudar a que las marcas muestren videos y desplieguen anuncios para los consumidores en otros sitios web a partir de los datos específicos que tienen sobre sus clientes. Por su parte, la estrategia más reciente de Google permite que la empresa venda anuncios y servicios que están vinculados más de cerca con transacciones reales, por las que pueden cobrar más (Cfr. Wakabayashi y Weise, 2019: 1).

La lucha está en el aire y deja claro que es posible comenzar a competir en aspectos que no son de raíz el punto más fuerte de alguna empresa; por lo que todo es posible con las estrategias adecuadas.

Cómo implementar la competencia

Para tener claro como competir dentro del giro de negocio al cual perteneces, es básico conocer la dinámica del mercado, quiénes son tus competidores y cuáles son sus características; para ello, debes analizar tal aspecto. Algunas preguntas que deberás responder son:

1. ¿Quiénes son tus competidores y cuántos son?
2. ¿De qué tamaño son las empresas competidoras y cuál su principal fortaleza financiera?
3. ¿Cuál es la calidad del producto/servicio ofrecido por la competencia actual y potencial?

Una vez respondidas tales preguntas:

• Determina cómo compiten las demás empresas, es decir, en qué tratan de centrar su diferencia, si en el precio, la calidad, promociones, forma de entrega, entre otros aspectos. Cuando lo hayas determinado podrás saber si lo que tu empresa oferta supera, equipara o resulta inalcanzable lo propuesto por tus contrincantes.
• Considera que la competencia se encuentra desde el posicionamiento de la marca, por ello, adéntrate en conocer el nivel de reconocimiento de tu marca, para reforzar, mejorar o mantener una estrategia de posicionamiento.
• Revisa cómo son tus ventas en cada región donde se encuentre tu producto/servicio, en relación con otras empresas, pues esto te permitirá considerar la visibilidad e inversión en marketing y publicidad para comenzar a competir (si resuelves que tus ventas son bajas en algún sector) o bien, para continuar con una buena posición dentro del mercado.
• Ofrece o desarrolla productos innovadores, pues recuerda que a los clientes les atrae lo nuevo y/o diferente, cuando tienes un ejemplar distinto comienzas a generar competencia; otros van a querer igualarte pero si tu servicio o producto es mejor, estarás un paso adelante.
• Busca opciones de mejora en el área comercial y de ventas; en marketing, producto, innovación, Dirección estratégica y desarrollo corporativo, de tal forma que puedas instaurar la competencia en cada una de estas áreas, para poder ampliar tu número de clientes y fortalecer tu empresa y su posición en el mercado frente a los competidores.

Costos de implementar la competencia

Con los ejemplos y elementos sobre la competencia que hemos expuesto, puedes observar que una gran parte de la competencia radica en la innovación. De acuerdo con la empresa ProyectosCAD diseñar un producto puede oscilar entre 1 200 y 6 000 euros; este costo no incluye el coste de fabricación, utillajes o moldes.

Por otra parte, existe la publicidad, a bajo costo puedes hacer publicidad en Facebook, según la propia página puedes hacerlo desde 5 dólares por semana, hasta 50 000 dólares.

Y si contratas los servicios de una agencia de marketing digital en México, los precios varían entre $2 500 y $20 000 pesos, donde los costos dependen de el tipo de proyecto a contratar, el dinero que desee invertirse y los costos de operación de la agencia; lo anterior, según datos proporcionados por la Agencia LTV Marketing Digital.

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Conclusiones

• Renovar, ofrecer un diseño diferente, adentrarse en un ámbito diferente son opciones que te permiten enfrentarte al competido mercado.
• Al momento de decidir cómo hacer frente a la competencia que te rodea es necesario recordar hacerlo con base en oportunidades, que te den ventajas, pero que también permita la mejora económica de más empresas, así todos saldrán ganando.
• La inversión inicial para la competencia comienza desde el planteamiento de estrategias, pues como pudiste leer, la competencia no está solamente en lo económico o las ventas.
• Antes de lanzar un producto/servicio al mercado toma en cuenta la clave que ha hecho triunfar a las grandes empresas… cuidado minucioso durante todo el proceso e innovación.

Tu turno

Te damos las gracias por leernos y te invitamos a comentar con nosotros tus impresiones sobre este tema. Asimismo, no dudes en compartir este texto con otras personas, que como tú tienen el entusiasmo de mejorar su negocio con nuevas herramientas y conocimiento.
¡Te deseamos éxito siempre!

Bibliografía